18.3.15

Vendetta

Quise mirarlo
las curvaturas de sus brazos
los trapecios al aire
pectorales suaves
y unos disimulados vellos
que se asomaban en su abdomen

El semáforo en rojo
y el ahí
luciendo su sensualidad
sin desearlo

Era el día más caluroso del año
el sol ardía sobre el cemento
que, hirviendo,
acaloraba a las transeúntes

El en su bicicleta
esperando pasar
yo con mi sombrero y vestido
pasé frente a él

Sin mayor disimulo
lo recorrí lentamente con la mirada
como deleitándome
de aquella maravillosa escena
tan exótica en la capital

Lo miré por placer
pero no pude evitar,
mientras lo hacía,
cobrar venganza

Por todas las veces que nos pasa a nosotras
que no nos dejan caminar tranquilas por la calle
sentirse observadas
vigiladas
vistas cual objeto de deseo
y propensas a cualquier
ataque
verbal o físico
que no espera respuesta alguna
sino que la expulsión agresiva
del mirón
del pervetido

La verdad,
aquel joven ciclista no tenía la culpa
de toda la impotencia que tenemos
hacia su género
cuando nos piropean
(al menos aparentaba ser respetuoso)
 mas fue inevitable
transformar la mirada inicial
de placer
a venganza

Sin esperar la luz verde
rápidamente pedaleó,
como huyendo de mi mirada descarada

Lo entendí
completamente

Nosotras hacemos lo mismo.

3.3.15

Carhuaz

Despierto
El gallo canta a mi oído
Es la hora del sol
Que
Renovado
Inicia
La inhalación
De un nuevo respiro de vida

En Carhuaz no sólo cantan gallos
Ovejas
Cerditos
Vacas
Burros
Toros
Abejas
Mujeres
Niños
Hombres
Niñas
Y caracolas

Las caracolas despliegan
En su interior
El sonido de la comunidad
De los originarios de la tierra
De quienes aman su tierra
Sus montañas
Sus apus
Sus ríos
Sus estrellas
Su abuelo fuego
Sus medicinas
Sus maizales

Es la hora del sol
Una mosca zumba en mi oído
Siento la piel de mi compañero
Tibia y relajada
El calor de la carpa aumenta
Abierta entra la brisa
Que suavemente
Nos despierta

En Carhuaz los niños y niñas van a su escuela
Chaupin
Entre los valles y cerros
Con lápices, témperas, cuadernos, tambores y rituales mágicos
Hay flores amarillas
Muchas
En Quechua eso es Carhuaz
Amarillo

El Sol nos pega en la tierra
Que han denominado de Chile
Comenzamos a desarmar
Para seguir la ruta a casa

Allá
En Carhuaz
En esta tierra pega el sol
Le han denominado Perú
Y esa tierra está más cerca del sol
En su altura de libertad

Regresamos
Mas volveremos
A tocar el tierno pasto
De las tierras verdes, cafés y amarillas
Calentadas
Por el sol que nos conecta.